Este fin de semana, llegó a mí la revista magazine, en ella venia un artículo que me pareció muy interesante y que casi estoy de acuerdo al 100%. El artículo de Marta Ricart, “La fórmula del talento” nos dice que “EL TALENTO”, no es innato sino fruto de una práctica intensa, y no es un intangible, se refleja en una sustancia que envuelve las neuronas en el cerebro, la mielina: cuanta más práctica adecuada de una actividad, más mielina se produce y se tiene más talento para esa actividad. Así explica la fórmula del talento el estadounidense Dan Coyle en su libro Las claves del talento (Ed. Zenith). Abona una teoría que en los últimos tiempos respaldan otros autores de su país, como imbuidos del sí podemos de Barack Obama: con talento no se nace, se hace…Pero ¿qué es el talento?, según Wikipedia, "el talento es una manifestación de la inteligencia emocional y es una aptitud o conjunto de aptitudes o destrezas sobresalientes respecto de un grupo para realizar una tarea determinada en forma exitosa. El talento puede ser heredado o adquirido mediante el aprendizaje". Es decir, el talento es una capacidad innata del ser humano (también puede ser adquirida con la práctica), que nos permite hacer correctamente alguna actividad. No estamos diciendo nada raro, solo que si queremos tener talento, tenemos dos casos o es innato o la tenemos que adquirir mediante práctica (yo les digo continuamente a mis alumnos que cuanto más se practique una cosa tenemos más posibilidades de éxito).
¿Cuál es la fórmula del talento? «(C+V) x A».
Es decir: Conocimiento más Valores (esfuerzo, afecto a la familia, respeto a los demás, integridad, compromiso, rigor), multiplicado por Actitud (debe ser positiva, pues «si no hay actitud, no hay vida»).
Aquí les dejo una reflexión para esta semana…
